En “Aquamarine”, la artista estadounidense Addison Rae se sumerge en un océano de autodescubrimiento y libertad: el agua turquesa simboliza su nuevo estado emocional, donde ya no se esconde y se reconoce como la única dueña de su propio universo. Entre imágenes de perlas, rayos de luz y reflejos, la cantante celebra la confianza en sí misma y la transformación personal, invitándonos a bucear con ella en una aventura luminosa y sensual en la que el amor propio brilla tanto como el sol sobre el mar.