Benny Benassi, el maestro italiano de la electrónica, se alía con la voz aterciopelada de John Legend para crear una aparente invitación a la fiesta. Sin embargo, tras el ritmo eléctrico de “Dance The Pain Away” se esconde un protagonista que observa la pista de baile y se siente fuera de sintonía. Mientras las luces parpadean, él confiesa que su corazón late tan fuerte que apaga el drum & bass, sus pensamientos viajan “a un millón de millas” y ni siquiera cambiar la canción en la radio logra animarlo.
La letra convierte la discoteca en un espejo de emociones: todo el mundo se mueve al compás, pero el narrador se pregunta una y otra vez “¿Cómo se baila para sacar el dolor?”. La canción destaca ese momento en que la tristeza pesa más que cualquier beat. Al enfrentarse a la imposibilidad de “bailar las penas”, el tema nos recuerda que reconocer el dolor es el primer paso para superarlo; solo cuando dejemos que caigan las lágrimas —como el DJ deja caer el bajo— podremos, finalmente, volver a vibrar con la música.