¿Alguna vez has sentido que tu vida necesita un reinicio? En Maybe It's Time, el artista francés Bradley Cooper nos susurra que quizá ha llegado la hora de dejar morir las viejas costumbres. La letra, íntima y reflexiva, reconoce lo difícil que resulta cambiar: «hace falta mucho para transformar a un hombre» y, aun así, merece la pena intentarlo. Cooper contrapone ese reto con la gran incógnita de la muerte —«nadie sabe qué espera a los muertos»— para invitarnos a vivir con valentía, sin aferrarnos a lo que ya no nos define.
En la segunda mitad del tema, el cantante mira su propio pasado con una mezcla de alivio y nostalgia. Agradece no poder volver a esos días, aunque rescataría ciertos “espíritus” para tenerlos cerca. Entre recuerdos de advertencias religiosas y la imagen de un mundo girando como un Catherine wheel, la canción concluye que el verdadero infierno es quedarse atrapado en la rueda de las viejas ideas. El estribillo vuelve entonces como un mantra: cambiar es duro, pero aferrarse duele más. Con una melodía sencilla y una voz cargada de sinceridad, este tema se convierte en un himno íntimo para cualquiera que busque reinventarse sin perder la esperanza.