Streetwise no es solo una canción, es una cápsula de recuerdos y sueños en la que Calum Hood nos hace levitar. El artista australiano evoca aquellos «dog days» cuando el cielo era amarillo y los pies nunca tocaban el suelo, y nos invita a recorrer una noche chispeante de luces de luna, coches furtivos y apartamentos que se transforman en pequeños paraísos. Con imágenes casi cinematográficas (ciudad aguamarina, puentes de concreto, saltos al vacío) mezcla nostalgia juvenil con la adrenalina de un amor que, sin aferrarse con fuerza, tampoco se marcha y siempre logra “tirar de nosotros” para que volvamos a su lado.
En medio de coros hipnóticos, Hood se pregunta si la vida es solo un gran sueño compartido, mientras celebra la libertad de lanzarse a lo desconocido y la calidez de encontrar refugio en otra persona. Streetwise es un viaje sonoro que honra el vértigo de crecer, el encanto de lo impredecible y la ternura de un romance que nos hace girar la cabeza y el corazón al mismo ritmo.