¿Alguna vez has sentido que te vendieron un sueño que resultó ser una trampa? En Head Down, la británica Cher Lloyd narra esa montaña rusa emocional: de creer que volaba alto a descubrir que en realidad estaba cayendo. La letra muestra cómo, cuando tenía solo diecisiete años, la sedujeron con promesas vacías y luego la dejaron hecha pedazos. Entre reproches y lágrimas, la cantante se da cuenta de que quienes la subestimaron y la ignoraron ahora intentan acercarse con halagos en sus redes sociales.
Pero no todo es desengaño. La frase “I’ma keep my head down” se convierte en un mantra de resistencia. Cher decide concentrarse, trabajar duro y cultivar la confianza que siempre supo que tenía para demostrarse –y demostrarles– que sí puede alcanzar el éxito. El resultado es un himno de empoderamiento y perseverancia que invita a mantener la cabeza baja solo para tomar impulso y, más adelante, alzarla con orgullo mientras los demás aplauden.