David Bowie vuelve a demostrar su talento camaleónico en Valentine’s Day, una canción cuyo título suena romántico pero es en realidad una crítica punzante a la violencia armada.
Bowie nos presenta a Valentine, un joven delgado y aparentemente insignificante que planea un ataque. Las letras aluden a:
La voz narrativa describe cómo Valentine “tiene algo que decir” y “todo sucede hoy”, enfatizando la inmediatez y el horror de un tiroteo. Bowie, desde su perspectiva británica, pone el foco en un problema muy estadounidense: la facilidad con la que la rabia y la alienación encuentran un arma de fuego. El resultado es una pieza inquietante y reflexiva que, entre acordes rock y un estribillo pegadizo, nos invita a cuestionar el culto a las armas y la violencia como vía de expresión.