¿Alguna vez has sentido que acabas de conocer a alguien pero parece que lo conocieras de toda la vida? Esa es la chispa que enciende “Déjà Vu”, la colaboración entre el legendario productor italiano Giorgio Moroder y la inconfundible voz de Sia. Sobre una base disco brillante, la letra juega con la idea de hechizos, pociones y perfumes, como si el destino utilizara un poquito de magia para reunir a dos almas que estaban destinadas a encontrarse. La protagonista reconoce que la espera ha valido la pena –«Good men come to those who wait»– y que, en el momento preciso, Cupido le entregó a su media naranja.
Más que un simple flechazo, el tema celebra esa sensación de familiaridad instantánea: “He caído por ti, siento un déjà vu”. El amor se describe como un sueño hecho realidad donde dos corazones laten al unísono, sin miedo a perder nada. En resumen, la canción es un himno a la paciencia recompensada y al poder del destino, envuelto en un ambiente retro que invita a la pista de baile mientras recuerda que, cuando el amor es verdadero, todo encaja como si ya lo hubiéramos vivido antes.