“Baby, It’s Cold Outside” es un dueto juguetón en el que Idina Menzel y Michael Bublé interpretan a dos personajes atrapados entre la tentación y las convenciones sociales. Ella insiste en que debe marcharse porque su familia la espera, mientras él la convence de quedarse un rato más poniendo como excusa el frío, la tormenta y la falta de taxis. Cada línea es un tira-y-afloja cargado de coqueteo: él elogia sus ojos y sus labios, ella se preocupa por el qué dirán, y entre bromas sobre refrescos y discos crean una atmósfera íntima alrededor de la chimenea.
El resultado es una conversación musical llena de chispa y dobles intenciones que refleja la lucha entre el deseo y las normas sociales de los años 40, época en que se escribió la canción. Aun así, la versión de Menzel y Bublé le da un aire moderno y cinematográfico, manteniendo el encanto retro pero con un toque fresco y navideño. En pocas palabras, es la banda sonora perfecta para una noche fría en la que lo único en juego es decidir si vale la pena desafiar la tormenta… o dejarse tentar por un baile más.