Rise del productor belga Lost Frequencies es un chute de energía positiva que invita a levantarse después de un año duro. Con una base electrónica luminosa y un estribillo pegadizo, la canción convierte las caídas en combustible para seguir adelante, celebrando la resistencia que nace cuando todo parece cerrado y oscuro.
El mensaje es claro y contagioso: aunque la duda sea una droga potente, la voluntad puede más. El narrador acepta el dolor, aprieta los dientes y escala de nuevo la montaña. Cada “I rise” es una declaración de victoria sobre la vergüenza, la lluvia y las puertas cerradas, recordándonos que la fuerza interior no necesita refugio. El resultado es un himno motivador que impulsa a atravesar las nubes con la determinación de un rayo de luz.