¿Alguna vez te has preguntado qué pasó con ese viejo amor que se mudó lejos? En Chicago, Louis Tomlinson –talento británico conocido por su sinceridad lírica– imagina un reencuentro a la distancia con una ex pareja que ahora vive en la Ciudad de los Vientos y hasta ha formado una familia. El cantante repasa recuerdos íntimos, como los nombres que ambos soñaron para un hijo o el número de teléfono que aún sabe de memoria, mientras se disculpa por los errores del pasado y reconoce que, aunque la relación terminó, no fue en vano. La canción vibra con nostalgia, gratitud y un pequeño rayo de esperanza: “Si te sientes sola en Chicago, puedes llamarme”.
Esta balada agridulce nos muestra que el fin no borra el significado de lo vivido. Más bien, invita a valorar aquellos momentos que nos hicieron crecer y a aceptar que algunas historias “simplemente no estaban destinadas a ser”. Con un estribillo pegadizo y letras que abren el corazón, Chicago es perfecta para practicar español mientras reflexionas sobre segundas oportunidades, viejas amistades y los lazos que persisten pese a la distancia.