Misfits nos invita a un viaje al estilo horror-punk donde el amor, la muerte y lo sobrenatural se mezclan en una atmósfera de película de terror de serie B. El narrador describe a una mujer misteriosa y cambiante —“Anything is what she is”— que parece existir fuera del tiempo y el espacio. Fascinado hasta la obsesión, él se ofrece a seguirla "anytime, anywhere" y, cuando la muerte finalmente la reclama, su devoción se vuelve más oscura: anhela desenterrar sus huesos para volver a sentirla cerca.
La letra alterna imágenes de trascendencia (“Point me to the sky above, I can’t get there on my own”) con escenas macabras en un cementerio, reflejando la lucha entre la esperanza de reunirse en el más allá y la cruda realidad de la pérdida. La rosa marchita que la Muerte lleva simboliza ese amor que se quema bajo un sol implacable. En conjunto, la canción es un grito apasionado sobre la imposibilidad de dejar ir, mezclado con la estética gótica y rebelde característica de Misfits.