¿Alguna vez has querido detener el tiempo para arreglar un amor que se tambalea? Eso es justo lo que hace el irlandés Niall Horan en Still. Con un tono íntimo y casi confesional, Niall abre su corazón y admite que su mente es un torbellino, que a veces reacciona de más y le cuesta pedir perdón. Sin embargo, entre disculpas y promesas, lanza el mensaje central: sigo enamorado de ti. La canción es un recordatorio de que la honestidad, por dolorosa que sea, puede ser el primer paso para volver a conectar cuando las estrellas parecen haberse apagado.
En esencia, “Still” es una súplica para volver a lo básico: el amor sincero. A lo largo de la letra, la distancia (“a thousand miles away”) simboliza tanto la separación emocional como la física, mientras que el estribillo insiste en la esperanza: we’ll be alright. Entre palabras de arrepentimiento y deseo de reconciliación, Niall nos dice que incluso después de discusiones y “guerras”, vale la pena luchar si todavía existe ese sentimiento. Así, la canción se convierte en un himno para quienes creen que el amor, con un poco de honestidad y humildad, siempre puede renacer.