¡Prepárate para entrar al club más exclusivo del amor! En “You Could Start A Cult”, el irlandés Niall Horan lleva la devoción romántica al extremo: su persona amada es tan magnética que podría fundar un culto y él lo seguiría sin pensarlo. Con un tono juguetón y exagerado, el cantante promete renunciar a todo lo que es y lo que será, dejando claro que su admiración rebasa la simple belleza física.
La letra está repleta de imágenes grandilocuentes: guerras declaradas por su amor, reinos enteros compitiendo por despertar a su lado y un compromiso de “seguirla hasta que no exista un mañana”. Aunque suene dramático, el mensaje es sencillo: cuando el amor es auténtico, la entrega se siente natural y hasta divertida. Esta canción convierte la adoración total en un himno pop pegadizo, invitándonos a celebrar la parte más apasionada —y un poco loca— del enamoramiento.