¿Qué sucede cuando sales de tu burbuja y descubres que el mundo no gira a tu alrededor? En Ain't It Fun, Paramore nos invita a dar ese salto. La canción es una sacudida divertida: hay ironía en ese “¿a poco no es divertido?” porque, en realidad, crecer duele. Hayley Williams le habla a alguien que siempre obtuvo lo que quiso y lo anima a reconocer que, en el «mundo real», ya no es el pez grande del estanque. Las frases repetidas —“don’t go crying to your mama”— subrayan la nueva independencia: ahora toca afrontar problemas sin recurrir a papá o mamá.
El tema mezcla un ritmo contagioso con un mensaje claro: la autoconfianza no se construye desde la comodidad, sino enfrentando la vida tal cual es. Entre coros brillantes y un aire casi gospel, la banda celebra la libertad de valerse por uno mismo mientras advierte de sus riesgos: estar solo, no poder contar con nadie más. En definitiva, Ain't It Fun convierte la realidad adulta en un reto emocionante y recuerda que la diversión verdadera llega cuando asumimos la responsabilidad de nuestro propio destino.