¿Alguna vez has prometido mil cosas y al final todo se quedó en «lo siento, se me fue el tiempo»? En Running Out Of Time, Paramore convierte la procrastinación diaria en un himno vibrante: flores que nunca llegan, perros que apenas salen del garaje y alarmas que se posponen veinte veces. Con su característico pop-rock eléctrico y un toque de humor sarcástico, Hayley Williams confiesa cada excusa posible mientras el reloj avanza sin piedad.
Sin embargo, la canción no se queda en la broma. Entre riffs ágiles y coros contagiosos, surge una verdad incómoda: ¿de qué sirven las buenas intenciones si nunca las cumplimos? El tema retrata la ansiedad de vivir a contrarreloj, la culpa de posponerlo todo y la presión social de llegar siempre «a tiempo». Con un guiño autocrítico, Paramore nos recuerda que todos somos corredores perpetuos contra el calendario, atrapados entre la risa y la realidad de estar… siempre quedándonos sin tiempo.