¿Te atreverías a jugártelo todo por amor? En “Writing’s On The Wall”, el británico Sam Smith se mete en la piel de un agente secreto que deja de huir y se enfrenta de una vez a sus miedos. Después de toda una vida esquivando el dolor —y el compromiso—, descubre a alguien que le hace querer quedarse. Sin embargo, esa decisión viene cargada de vértigo: amar implica exponerse, arriesgar el corazón y aceptar que el pasado puede romperse “en un millón de fragmentos de cristal”.
La canción, himno de la película Spectre de James Bond, retrata ese instante crítico en el que se siente que “las estrellas se juntan” y no hay marcha atrás: la señal está escrita en la pared y solo queda avanzar. La letra late con preguntas existenciales (“How do I live, how do I breathe…?”) que reflejan la ansiedad de perder al ser amado, pero también la determinación de saltar al vacío con tal de sentir el amor fluir “como sangre” por las venas. En resumen, es un poderoso llamado a dejar las excusas, plantarse ante la tormenta y arriesgarlo todo en nombre de un vínculo verdadero.