¿Alguna vez te ha seducido alguien que sabes que es una apuesta peligrosa? Eso es exactamente lo que cuenta "My Type". The Chainsmokers y Emily Warren pintan el retrato de una relación tan adictiva como caótica: esa persona que solo llama de madrugada, llega con unas copas de más y jamás promete quedarse, pero aun así encaja en el molde de tu tipo. Entre bases electrónicas y letras sinceras, la canción muestra el pulso entre la lógica, que avisa del desastre, y el deseo, que pide otra ronda.
El tema se convierte en un himno a los amores tóxicos pero irresistibles. El narrador admite que nunca logrará cambiar a su amante, sabe que solo es un plan B, y aun así no logra soltarlo. Con ello, la canción celebra esas contradicciones que todos hemos vivido: el autoengaño, la adrenalina y la aventura que a veces elegimos aun sabiendo que el corazón terminará pagando la cuenta.