¿Alguna vez has querido sacudir a un amigo para que recuerde lo valioso que es? Esa es la energía que palpita en Friend, Please. La voz del cantante se convierte en un salvavidas: detecta que su compañero vive atrapado en una telaraña mental —“arañas” que se instalaron donde antes había luz— y no piensa dejarlo hundirse. Cada verso mezcla ternura y alarma, como si fuera una conversación a media noche entre dos confidencias, donde uno ruega: “quítate las manos de los ojos” y mira que todavía hay esperanza.
La canción vibra en tres ideas principales: 1) reconocer que la depresión puede hacernos sentir invisibles, 2) recordarle a quien sufre que no está solo y 3) prometer compañía incondicional hasta “ver la luz”. Con un tono íntimo y casi susurrado, la letra se convierte en un abrazo musical que dice: “Quédate, hablemos, vivir vale la pena”. Perfecta para practicar vocabulario emocional en inglés y, de paso, para ponerle banda sonora a la empatía.