Unsteady es una balada cargada de emoción en la que el vocalista de X Ambassadors se confiesa frágil y tembloroso, como quien intenta mantener el equilibrio en medio de una tormenta familiar. Con el grito repetido de “Hold on, hold onto me”, nos invita a sentir su desesperada necesidad de apoyo: pide a mamá y a papá que no se suelten, que sigan abrazándolo mientras la casa —su hogar emocional— se tambalea.
A lo largo de la canción, el narrador se dirige tanto a sus padres como a sí mismo, reconociendo el cansancio, las peleas y el deseo de huir. Sin embargo, el mensaje central es de esperanza: si nos amamos, no nos soltemos. Así, Unsteady se convierte en un recordatorio de que la vulnerabilidad puede unirnos y de que pedir ayuda cuando nos sentimos inestables es un acto de valentía tan poderoso como la música que lo acompaña.