¿Listo para zarpar con Ed Sheeran? En “Boat”, el cantautor británico se sube a una pequeña embarcación imaginaria para navegar por mares de tristeza, dudas y recuerdos. Las imágenes de olas, viento y maderos golpeados por piedras pintan un paisaje frío, pero la melodía y la letra esconden un mensaje de resistencia: el propio Ed confiesa que cuanto más ama, menos siente, y aun así repite como un mantra que “the waves won't break my boat”. La canción es casi un ejercicio de mindfulness: sentir la brisa, notar el agua helada y reconocer las cicatrices para recordar que hay belleza incluso cuando todo parece gris.
Al escucharla descubrirás que “Boat” no promete borrar el dolor; lo que promete es enseñarte a flotar sobre él. En solo tres minutos Sheeran mezcla vulnerabilidad y valentía, recordándonos que los golpes del pasado quizá no desaparezcan, pero tampoco tienen por qué hundirnos. Si alguna vez te has sentido a la deriva, este tema se convierte en ese salvavidas musical que te anima a mantener el timón firme, respirar profundo y confiar en que tu barca, por pequeña que parezca, es más fuerte que cualquier tormenta.