¿Alguna vez has sentido que tu ex funciona como un boomerang emocional? "Never Really Over" de la cantante estadounidense Katy Perry nos sumerge en ese vaivén sentimental: acabar una relación, prometerse no volver a caer... y terminar pensando otra vez en la persona. A ritmo de pop explosivo, la letra retrata la lucha interna entre la razón ("dibujo la línea, no lo haré de nuevo") y la tentación de reabrir el capítulo, incluso dos años después. El resultado es un himno pegadizo que normaliza los retrocesos y recuerda lo difícil que es “desconectar” cuando los recuerdos siguen a un clic de distancia.
Más que una simple canción sobre el desamor, es un recordatorio de que sanar rara vez es un proceso lineal: a veces creemos haber superado todo, pero un solo pensamiento puede llevarnos a recaer y empezar de cero "all over again". Katy mezcla honestidad, humor y autoterapia (¡hasta menciona la hipnosis!) para decirnos que no pasa nada si tropezamos; lo importante es levantarse y seguir reprogramando el corazón. Prepárate para tararear, practicar tu inglés y, de paso, abrazar tus ciclos de “recaída y recuperación” con una sonrisa. ¡Sube el volumen y disfruta la lección!