Imagina una noche de verano en Los Ángeles: el cielo se pinta de neón, el asfalto aún conserva el calor del día y una pequeña chispa de amor se convierte en llama. Break My Heart retrata ese instante mágico en el que dos personas —Selena y Ava lo narran a dúo— descubren que, pese a los fantasmas del pasado, basta abrazarse para sentirse en casa. La canción celebra la sensación de pertenencia: él o ella se vuelve refugio, guerrero contra monstruos internos y arquitecto de un corazón reconstruido.
Entre luces de la ciudad y sueños que parecen demasiado buenos para ser reales, la letra combina nostalgia y esperanza. El mensaje es claro y optimista: el amor auténtico no solo quita el aliento, también enseña a sanar, a recuperar la capacidad de sentir y a creer que, incluso en el caos urbano, siempre hay un lugar seguro cuando se comparte con la persona correcta.