Con un ritmo que invita a bailar, Love Don’t Cost a Thing es la declaración firme de Jennifer Lopez de que el amor no se compra con joyas, autos ni excesos. La artista neoyorriqueña-puertorriqueña se planta ante un pretendiente ostentoso y le recuerda que su afecto no depende de su cuenta bancaria: ella ya tiene su propio brillo y lo que busca es tiempo, sinceridad y buen trato.
Este himno pop-R&B celebra la independencia emocional y financiera, animándonos a valorar lo que no está a la venta: respeto, honestidad y compañía genuina. Perfecta para ampliar tu vocabulario sobre relaciones y dinero mientras disfrutas del beat, la canción invita a dejar de lado las apariencias y apostar por conexiones reales que, como dice el coro, «no cuestan nada».