¿Alguna vez has sentido que alguien toca tu corazón como si fuera un instrumento y, justo cuando empiezas a bailar, corta la música? Eso es lo que Demi Lovato retrata en "Without The Love": una relación que suena espectacular por fuera, llena de riffs, baterías y focos, pero que carece del elemento esencial: el amor auténtico.
Con imágenes de escenarios, besos a ritmo de bajo y un pretendiente que se cree DiMaggio, la cantante denuncia la superficialidad de quien colecciona conquistas para lucirse. La repetida pregunta “What good is a love song without the love?” es un recordatorio pegadizo de que las palabras románticas y los gestos grandilocuentes no valen nada si no hay sinceridad. La canción nos anima a reconocer cuando la “melodía” de una relación ya no armoniza y a recuperar el control antes de que los recuerdos se desvanezcan como acuarelas en el agua.