Nobody’s Love de Maroon 5 es una declaración apasionada de fidelidad total. Adam Levine, desde Estados Unidos, canta sobre un amor tan intenso que la sola idea de perderlo haría llorar a un hombre adulto. En cada verso repite que, si su cariño no pertenece a esa persona especial, entonces no será de nadie más. La imagen de llevar su mano en el bolsillo trasero, sentirse "golpeado como una droga" y rogar al cielo destaca lo irremplazable de esa conexión.
Esta canción celebra la lealtad radical: cuando encuentras a alguien que encaja como un guante, ningún otro amor sirve. El narrador promete que nunca buscará otra confianza ni otro afecto, porque su corazón tiene una sola llave. El resultado es un himno pop que mezcla vulnerabilidad y determinación, perfecto para practicar vocabulario romántico mientras tarareas un coro pegajoso.