¿Quién soy? Soy lo que pienso, no lo que tú dices. Con esa actitud directa, Billie Eilish dispara una ráfaga de autoestima en “Therefore I Am”. La joven artista de Estados Unidos mezcla filosofía pura —la famosa frase de Descartes “Pienso, luego existo”— con un beat irresistible para recordarnos que nadie tiene derecho a apropiarse de nuestra identidad ni colgarse de nuestra fama. Entre ironías y un toque de sarcasmo, la canción expone a esos personajes que presumen ser “el hombre” mientras viven en un mundo idealizado, ajeno a la realidad.
Mensaje principal: pon límites, sé dueño de tu propio nombre y diviértete viendo cómo a los ego-inflados se les pincha el globo. Billie no busca pleitos; simplemente deja claro que no necesita tu aprobación para existir. El resultado es un himno de independencia y autenticidad que reta a cada oyente a decir con orgullo: “No soy tu amigo, soy lo que pienso y punto”. 🎤✌️